lunes, septiembre 19

Bob Dylan al desnudo

El otro día estábamos en el restaurante Tex-Mex de Gijón apretándonos unas cervezas Pacífico y guacamole a go-go, como sin saber como salio el tema de quien había visto a Bob Dylan y quien le ve. No se quien comentó lo de que daba un poco de repelús haberle visto tocar para el papa y tal y cual y entonces empecé a meter la patita sutilmente:

- Pues da más repelús si piensas que el Dylan era judío -apunta Karakola
- ¿Judío? No tienes ni idea; ni judío ni nada, era ateo. (ole mis güevos)
- A ver, que era judío y además ni se llamaba Bob Dylan ni nada, que es nombre artístico porque tiene apellido judío y se lo cambió por que lucía más llamarse Bob Dylan.
- Perdona, pero no tienes ni idea. Dylan es apellido real del paisa este. (Ahí, ahí reafirmando convicciones)

Tras esto Karakola se centró en el guacamole y me miró como diciendo prubín, pero yo había quedado de sobrao. Pues bien amigos. Aquí me tenéis para rectificar de manera pública y así aclarar la situación.
De las pocas cosas que dije ciertas de Bob Dylan es que era/es bien feo el jodido y que tiene una voz como si tuviera rinitis crónica. También comenté que el secreto de su éxito eran las letras (acabo de descubrir el flogisto). Pero veamos lo que era un poco menos cierto:
  • "Bob Dylan no judío ni nada; era ateo"; vale pues judío de pura cepa. Sobre lo de si era ateo pues eso es difícil de saber pero posiblemente no lo fuera ya que coño, si te vas a convertir a alguna religión cuando entras en edad senil, digo yo que apuestas por la cábala, el jare-chrisna o algo más divertido que ir a cantar a Karol Wojtila (que dormía más en los conciertos que el padre de Hommer Simpson)
  • "Dylan era su apellido real"; Aquí es que ya lo bordé. Bob Dylan se llamaba Robert Allen Zimmerman, de los Zimmerman de toda la vida. No obstante el cambio de nombre se entiende porque pedirle a tu colega lo último de Zimmerman, igual te pasa algo de la Marvel de un supereroe que imita el zumbido de la abeja carnívora o algo
Pues eso. Que cuidadito con tirarse a la piscina o ir de sobrao que luego viene Paco con la rebaja. Y menos mal que una calentura no salieron las apuestas a la mesa porque entonces ya uno se calienta y es capaz de hipotecar la vida por el apellido de un tío feo, que canta con voz de estar constipao y que se apellida Zimmerman. Así somos los tíos; así de molones :)