Se aproxima el fin de año y con él llegan las jornadas de ingesta masiva de brebajes y manjares en multitud de cenas y compromisos. Fruto de alguna de estas festivas farturas debió ocurrírsele a Aberto Mortera concejal de urbanismo de Oviedo la siguiente perla:
"Si no hubiera viviendas, Santa María del Naranco sería presa del botellón y actos vandálicos"
Todo esto viene porque se le ha permitido edificar a un propietario de una finca que está a escasos 98 metros de Santa María del Naranco. Total, que más da, además por lo que nos informa el concejal, hasta puede ser positivo el pelotazo.
Si es que no hay cosa que moleste a la chavalería que un chalet en el campo visual. El cacharro ya no sabe igual, ni aunque eches 100 pipers, ni aunque esté en vasu sidra. Tener a la vista un chalet acojona y amarga a pares iguales.
Pero el despropósito político no acaba aquí, atiende. El gobierno del ayuntamiento de Oviedo lo lleva el Partido Popular y como bien supones, alguien tendrá por encima. Efectivamente y además de distinto signo político, el gobierno del principado que está en manos del PSOE. Pues al enterarse de la sentencia del gobierno de Oviedo, el del Principado se opuso a la edificación, pero no presentó recurso a la sentencia, por lo que el tema sigue adelante.
Personajes del tipo de este concejal, todavía se permiten declarar que al propietario de la finca no le van a dejar construir cualquier cosa:
"Desde luego que no permitiríamos un edificio de cuatro plantas y de vidrio"
Vamos, que encima entiende de impacto arquitectónico y visual, acojona. Esperemos que no les de por pensar en poner cristales en Santa María del Naranco porque corre mucha corriente cuando sube la gente de visita o unas luces de navidad en Lillo para dar ambiente navideño.
La noticia en El Comercio
viernes, diciembre 19
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