lunes, diciembre 15

90 kilos de marisco

Leyendo el titular, lo mismo puedo estar hablando del cierre de la rula de Gijón o del peso de la camarera del Valle de Tuscany. Si esperas que hablemos de los putis y su fauna, nada más lejos de la realidad; el tema de hoy y más estando en fechas de farturas, es una marsicada no consumada.

Luisja, mi topógrafo de cabecera vuelve a aportar datos sobre una historia que sólo puede pasar en Asturias. Pongámonos en situación, retrotrayéndonos al 2004:

Tenemos a Gelín,ex-camareru de una marisquería de Avilés que por unas desavenencias de las que no tenemos conocimiento, que casi al 99% de probabilidad será por tema de perres, lleva una semana en casa maquinando como vengarse del chigre. Ponte en el papel de Gelín, tas en casa porque echáronte sin paro, con la muyer calentándote la cabeza, "que si no vales pa nada", "que no eres hombre, Angel", "que menudas navidades pa los críos", total que nuestro protagonista decide dar un golpe donde más duele, en la caja del chigre.

Gelín, que aunque pufista nunca tuvo malicia pa ser atracador, no piensa robar el chigre, sino realizar un simpa no presencial como veremos a continuación. Lo primero fue buscar un calcetín de Padre, de los de lana de los de antes para poner en el auricular y después llamar por teléfono a la marisquería. Luego poniendo voz de directivo de PYME encargó una cena para 34 paisanos de los de antes. Como tales, iban a apretarse cada uno una andarica, un lubrigante de un kilo y una centolla del mismo pesaje, amenazando que como nun fueran del Cantábrico iba a montar la de mi madre. También dejó claro que si cuando llegaran a cenar estaba frío el marisco que no contaran con cobrar.

90 kilos de marisco; al dueño del chigre ya se le hacía el culo pesicola pensado en la factura, porque con el menú esti seguro que colaba medio quintal de percebes y sabediox cuantes botelles de vino. Total que cómo no, el chigreru no puso inconveniente a las exigencias. Eso sí, sólo pidió un teléfono de contacto.
Bogavante a la plancha

¡Ay amiguín! ¡púdote la codicia! ¿Vas a cocer 90 kilos de marisco pa una cena sin tener ni el DNI, ni una señal del supuestu directivu? Caro, como son gente de fiar y paguen en efectivo... Como se nota que en los chigres ven Panorama Regional y cuando vienen les noticies de economía internacional apaguen la tele.

Total que llegó el día de la cena. El dueño del chigre había preparao un dispositivo de la de mi madre. Toalles colganderes limpies pa los brazos de los camareros, veles de olor "alpine white" pa los centros de mesa, tenazes art-decó para desmembrar el bogavante, el recopilatorio de Ochote La Unión por megafonía así a volumen bajino...

Pero nun veníen los comensales. En un primer momento pensaron que igual estaban tomando algo por la zona, pero al pasar una hora empezaron los cuchicheos entre el personal del chigre. Más aún cuando al llamar al teléfono de contacto no había respuesta.

Como vemos, hasta este momento, Gelín tenía en sus manos el golpe perfecto: una mariscada infructuosa de 6000 y pico euros, cara de gilipollas de su ex-jefe, regodeo espiritual, patatím, patatám.

Pero una vez más, sale a la luz la dura realidad del pufista wannabe. No se le ocurre otra cosa a Gelín que llamar desde el móvil. Ahora hazte a la idea de los acontecimientos: chigreru llama a las fuerzas del orden, teniente Furilo que cruza datos de Vodafón, hallazgo de los datos de Gelín, juicio y empieza el show.

Ahora, volvamos al presente. Esti jueves Gelín siéntase como imputau en el juzgao y piden-i 6 años de prisión y una indemnización de 6.082 eypos. Para ablandar a su señoría el chigrero va a presentar fotos de la mariscada servida el día de autos. ¿Habrá imágenes más dolorosas que ver 90 kilos de marisco enfriándose en la mesa?

Mira el Gelín, de "Vengador enmascarado" a "Joven y debutante" en Villabona. ¿Merez Gelín semejante castigo? ¿6 años por pedir una mariscada y achantar? ¿qué hacemos entonces con los banqueros? ¿pa la Guayana a depilar tábanos?

Esperemos que si alguno tiene la tentación de liar una como esta por lo menos llame desde la cabina de teléfonos o por lo menos desde el móvil de un compañero de trabajo, que así por lo menos las risas a la hora del café van a estar aseguradas.

La noticia que me mandó LuisJa venía en la Nueva España

2 comentarios:

martiuski dijo...

Madre mía, ayer salía en la nueva españa la foto de la fartura...si es que no hay que fiarse de nadie, y menos cuando hay tanta pasta por el medio...pena de marisquito!!

Anónimo dijo...

Pero Gelín... ¿cómo no buscaste a un ser querido no cegado por el odio que te maquinara la vendetta, no ves que en condiciones de despido improcedente la enajenación mental está asegurada? Justo sería que nos hiciéramos con el teléfono del establecimiento y nos sumáramos a los encargos de centolla bajo el lema "Yo también soy Gelín".